No sólo será Alcoa, el final de la semana lo ocuparán las cuentas de algunos bancos
Wells Fargo y JP Morgan
Chase. Como siempre los expertos han hecho sus apuestas y no esperan sorpresas, aunque nunca se sabe. “El foco del mercado cambiará esta semana hacia los resultados”, afirman los analistas de JP Morgan.

Lo que podría ser un arma de doble filo. Si las sorpresas son positivas, podríamos asistir a un cambio de sentimiento en un mercado que está falto de catalizadores. Si, por el contrario, los números de las compañías son negativos, podría ser lo que le faltaba a aquellos inversores que siguen apostando por una corrección en los mercados. (Ver: los osos pasean por Wall Street en abril)



Sin embargo los analistas de JP Morgan consideran que el listón está muy bajo en este primer trimestre. “Las actuales previsiones basadas en un análisis bottom up muestran una caída secuencial con respecto al trimestre anterior”, explican. “Como resultado esperamos que la temporada de resultados pueda superar las expectativas con facilidad”. Y todo a pesar del alto ratio de preanuncios de beneficios negativos.

Por eso en la firma mantienen una recomendación de sobreponderar la renta variable estadounidense.

Según los datos de Facset, las expectativas para el S&P 500 son muy bajas. El consenso que maneja la firma espera una contracción del beneficio en el primer trimestre de un 1,2%. Sería la primera contracción desde el tercer trimestre de 2012. El mismo consenso sólo espera una mejora de los ingresos de un 2,3% en este tiempo.

Los analistas de Helvea Baader Bank Group también coinciden en que en esta temporada las empresas provocarán, fundamentalmente, sorpresas positivas.

Según los datos que manejan en esta firma, durante los últimos trimestres el ratio de sorpresas positivas (mejores resultados menos peores resultados de lo esperado) rondó el 45%. Esto significa que los inversores terminaron la temporada con un buen sabor de boca y la sensación de que las empresas estaban en mejor estado del que estimaban inicialmente.

Sin embargo, aunque en esta firma consideran que los beneficios serán más altos de los previstos, esperan que las previsiones para el conjunto del año vuelvan a ser negativas también en esta temporada.

Así, en la entidad apuntan que en Estados Unidos los preanuncios negativos siguen alcanzando niveles record. En estos momentos, para el primer trimestre del año se han producido ya 111 alertas de beneficios (profit warning). Esto significa que “aunque en los últimos tiempos la economía estadounidense ha mostrado unos buenos ratios de crecimiento, las empresas no lo están teniendo fácil para alcanzar sus objetivos”. Por el contrario, según estos datos sólo se han producido 17 preanuncios positivos.



En la firma aconsejan precaución ante los días que se avecinan. “Con los mercados cerca de máximos mantenemos nuestra visión y afirmamos que el crecimiento de los resultados será crucial con respecto a la dirección que adoptarán los mercados a partir de ese momento”. Todo en un mes de abril que suele ser positivo para las bolsas tradicionalmente, en contra de lo que ocurre con los meses de mayo y junio.