Tras muchas dudas acerca de la rentabilidad de los activos que ofrecía Enel (pues fue él el que liberó un 22% del capital de la eléctrica para free float), los inversores han cubierto la OPV. Endesa ha dado por concluida la operación de forma satisfactoria y, es que, la demanda en el tramo minorista ha superado en 1,7 veces la oferta y, en el caso de los mayoristas, le bastaron dos días para colocarlo.

Ahora bien, el precio final de venta en ambos tramos ha sido de 13,50 euros
. Recordemos que la OPV no se lanzó con una banda de precios, sino con un único precio máximo como referencia, 15,535 euros. Por tanto, el precio final se ha situado un 15% por debajo del máximo que solicitaba Endesa. Y, es que,
los inversores institucionales, que tenían que esperar a que el tramo minorista estuviera cerrado para que se les asignara el mismo precio de colocación, presionaron días antes para no tener que pagar por las acciones más de 13,5 euros. Vamos, que el precio de colocación definitivamente estuvo decidido por los institucionales, sí, ésos que parecía que estaban realmente a merced de las peticiones de los minoristas.

Como los minoristas estaban obligados a comprar como mínimo, 1.500 euros y, como máximo, 200.000, habrán adquirido paquetes accionariales entre 111 y 14.814 títulos por persona.

Curioso que, aun habiéndose pactado el precio de colocación un 1,53% por debajo del precio de cierre de Endesa de la sesión de ayer, hoy los títulos de la compañía española se disparan un 6% hasta los 14,53 euros. Es decir, un 7,63% por encima del precio de venta de los títulos de la OPV.

La adjudicación definitiva de los títulos en todos los tramos se ha realizado hoy, por lo que los inversores que acudieron a la OPV están ganando de golpe un 6%. Puede parecer contradictorio que Endesa no haya caído tras adjudicarse un 19% de sus acciones más baratas de lo que estaban en mercado, pero lo cierto es que parece estar actuando un ‘cuidador’ del precio. Como figura en la información adicional al folleto de la OPV enviado hoy por Endesa a la CNMV, desde hoy y hasta el 15 de diciembre, Credit Suisse, como agente de estabilización, podrá realizar operaciones de estabilización en el Mercado Continuo. En otras palabras, lo que hace Credit Suisse es lo mismo que lo que hace un teórico contrato de liquidez: dar contrapartida a demanda y oferta y estabilizar el precio de la acción si hay mucha volatilidad.

Para apoyar/cuidar el precio, las entidades coordinadoras han sobre-adjudicado en la oferta total de la OPV 30.270.000 acciones (equivalentes al 15% del número de acciones objeto de la OPV). Esto es lo que se conoce como green shoe. Esta cláusula permite aumentar la oferta inicial realizada en un determinado porcentaje de acciones, que en el caso de la OPV de Endesa se ha terminado por fijar en el máximo previsto, 30.270.000 títulos, ya que la oferta fue por el importe de la oferta máxima. Con esta arma se consigue adecuar la oferta y la demanda y evitar que caiga el precio y, es que, para ejecutarlo a favor de los colocadores, a éstos les compensa que el precio de la acción en el mercado suba para ejercer su opción, que se liberen 30.270.000 títulos adicionales al mercado -alcanzando así el 22% de capital de Endesa- y quedarse con ellos ganando, si no, no lo ejecutarían.

Una vez finalizada la tutela del agente de estabilización, es decir, a partir del 15 de diciembre, ¿hasta dónde podría caer el precio? Jorge del Canto considera que “será posible adquirir las acciones más adelante a un mejor precio, al menos los 13,80 euros”.