El producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos experimentó una contracción del 0,1% en el segundo trimestre de 2022, según la segunda estimación del dato publicada este jueves por la Oficina de Análisis Económico del gobierno estadounidense, que rebaja en una décima su previsión inicial, publicada el mes pasado.

Estados Unidos entró en recesión técnica durante el segundo trimestre, ya que en los primeros tres meses del año observó una caída del 0,4%. Se denomina recesión técnica, según el consenso de los economistas, a la situación económica que se da al encadenar dos trimestres de contracción económica.

El frenazo de la economía estadounidense llega en un momento de alta inflación y de subida de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal de EEUU. La tasa de inflación interanual de Estados Unidos se situó el pasado mes de julio en el 8,5%, seis décimas por debajo del 9,1% observado en junio y la menor subida de los precios desde el pasado mes de abril, según la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos.

El alivio de la subida de los precios en julio respondió a la moderación del encarecimiento de la energía al 32,9% desde el 41,6% de junio, mientras que en el caso de los alimentos la escalada de los precios se aceleró al 10,9% desde el 10,4% de junio, el mayor aumento desde mayo de 1979. Sin tener en cuenta el impacto de los alimentos y de la energía, la tasa de inflación subyacente de Estados Unidos en julio fue del 5,9%, en línea con el dato del mes anterior.

Alemania evita la recesión pese al gas ruso

De momento, Alemania también ha podido esquivar la recesión a pesar de la restricciones en la importación de gas ruso. El producto interior bruto (PIB) de Alemania creció un 0,1% entre abril y junio respecto del primer trimestre de 2022, cuando había registrado una expansión del 0,8%, según la segunda estimación de la Oficina Federal de Estadística (Destatis), que ha revisado una décima al alza el dato de actividad, que recuperó así el nivel del cuarto trimestre de 2019, inmediatamente anterior a la pandemia. 

En comparación con el segundo trimestre de 2021, la mayor economía del Viejo Continente experimentó entre abril y junio una expansión del 1,8%, indicó Destatis.

La economía española todavía no ha entrado en recesión técnica aunque hay muchas voces que pronostican una desaceleración en los próximos trimestres. "La economía de España se encaminó hacia el estancamiento en agosto, ya que el sector servicios siguió la tendencia del sector manufacturero al registrar solo un crecimiento marginal", alerta el director económico de S&P Global Market Intelligence, Paul Smith.

La recesión de la economía podría llegar por contagio de la desaceleración de países como Alemania o Italia, más expuestos a las importaciones de energía de Rusia. Moscú ha reconocido ya este lunes que no reanudará el suministro a la Unión Europea por el gaseoducto Nord Stream 1 mientras no se levanten las sanciones impuestas por el conflicto bélico. El Kremlin responsabiliza a Bruselas de que los flujos de gas estén suspendidos al no poder encontrar las herramientas para reparar la fuga por las sanciones, sin embargo la empresa fabricante asegura que no es motivo para cortar el suministro.

"El aumento de los precios del gas puede seguir provocando 'apagones' en todo el continente, reduciendo naturalmente el crecimiento", apuntan desde Monex Europe.

Un dato a tener muy en cuenta es que la Seguridad Social perdió 189.963 afiliados en agosto, con una caída del 0,93% respecto a los datos registrados el mes anterior, el peor dato desde 2019, según las cifras presentadas este viernes por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Con este descenso, el número total de cotizantes cerró agosto en 20.151.001, de los que 10.771.093 fueron hombres y 9.379.908 mujeres.

El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) aumentó en 40.428 personas en agosto, un 1,4% más que en julio y vuelve a situarse por encima de los 2,9 millones de parados, concretamente en los 2.924.240 desempleados, según los datos publicados este viernes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

FMI, Comisión Europea y bancos de inversión no ven recesión

Sin embargo, ningún gran organismo internacional estima que España vaya a entrar este mismo año en recesión. El Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó a finales de julio sus nuevas perspectivas económicas, que incluyen una rebaja generalizada para todo el mundo, incluida España, debido a las implicaciones de la inflación en Occidente, una ralentización peor de lo esperado en China y las consecuencias de la guerra en Ucrania.

El FMI considera que España crecerá un 4% en 2022, lo que supone una rebaja de ocho décimas frente a las previsiones publicadas en el mes de abril. Con respecto a 2023, el Fondo espera que España contabilice un crecimiento del 2%, lo que supone una abultada reducción de 1,3 puntos respecto a los pronósticos de hace tres meses. De esta forma, el organismo estima que el crecimiento en el cuarto trimestre de 2022 frente al mismo periodo del año pasado será del 1,3%, mientras que en el cuarto trimestre de 2023 será del 2,3%.

El cuadro macroeconómico del Gobierno español pronostica un crecimiento del PIB en 2022 del 4,3%, mientras que para 2023 lo sitúa en el 2,7%, ocho décimas menos.

Por su parte, la Comisión Europea espera un crecimiento para la economía española del 4% en 2022 y del 2,1% (-1,3%) en 2023, y una inflación del 8,1% en 2022 y del 3,4% en 2023. La Comisión subraya cómo la invasión rusa de Ucrania ha aumentado las presiones sobre los precios de la energía y los alimentos, pero anticipa un impulso al crecimiento en 2023 respaldado por el mercado laboral, la moderación de la inflación, el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia y el importe de ahorro excedentario.

En la misma dirección apuntan grandes bancos de inversión como Bank of America y Goldman Sachs o la agencia de calificación crediticia S&P Global. 

En el segundo trimestre del año, asimismo, España registró un crecimiento del 1,1% de su Producto Interior Bruto (PIB) en el segundo trimestre, lo que supone ocho décimas más que la media de incremento de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que alcanzó un 0,3% en el mismo período. 

Además, España recibió en julio la visita de cerca de 9,1 millones de turistas internacionales que gastaron en su desplazamiento un total de 11.869 millones de euros, según los datos de las encuestas Frontur y Egatur que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE). Estas cifras suponen recuperar el 92% de las llegadas del mismo mes de 2019 y prácticamente igualan el gasto de julio de 2019 (-0,6%).