Liechtenstein se ha visto sometido últimamente a fuertes presiones para acabar con su secreto bancario, que convierte al pequeño principado en uno de los principales paraísos fiscales europeos.
Según los expertos, el acuerdo que se negocia con Liechtenstein podría servir de modelo a escala internacional para poner al descubierto cuentas bancarias secretas.
Liechtenstein se ha declarado dispuesto a negociar acuerdos bilaterales con otros países y la pasada semana celebró ya una primera tanda de conversaciones con Alemania.
Otro de los paraísos fiscales europeos, Mónaco, donde tienen su residencia fiscal 25.000 multimillonarios extranjeros, se comprometió este jueves a cumplir los estándares internacionales sobre transparencia bancaria.