Iberdrola ha instalado 68 nuevos megavatios (MW) eólicos en Reino Unido y Estados Unidos en los meses de junio y julio, con lo que su potencia instalada de esta tecnología en el mundo asciende a 14.260 MW.
Según han indicado fuentes de la eléctrica, en estos dos meses ha puesto en marcha más de 58 MW eólicos en el Reino Unido, distribuidos en tres parques: Kilgallioch (32,5 MW), Dersalloch (24 MW) y Black Low (cuya fase dos ha incorporado 1,67 MW).
Así, la potencia eólica instalada de Iberdrola en Reino Unido asciende a 1.687 MW, de los que 194,4 MW son marinos. Mientras tanto, en Estados Unidos ha instalado 10 MW en el parque eólico Desert Wind, con lo que la presencia de Iberdrola en el país, a través de la cotizada Avangrid, suma 5.486 MW.
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Además, la compañía inició en junio la construcción del parque El Cabo (Estados Unidos), de 298 MW. La energía eólica es uno de los pilares del plan estratégico de Iberdrola, una tecnología en la que prevé invertir 7.920 millones de euros en el periodo 2016-2020.
Así pues, si lo traducimos a la evolución en los mercados, lo que observamos es que Iberdrola se encuentra en fase de consolidación, tal y como señalan nuestros filtros técnicos. La acción recibe una puntuación de cinco puntos en una escala que oscila entre el cero y el diez. Su tendencia de medio plazo es alcista, aunque de largo plazo es bajista.
El valor recibe una valoración mixta de los indicadores puesto que la mitad se encuentran en negativo y el resto en positivo. Su momento total lento y total rápido se encuentran en positivo. Sin embargo, el volumen de contratación es decreciente en todos los marcos temporales. Aun con todo, la volatilidad que presenta el activo es decreciente tanto en el medio como en el largo plazo.
