Ha explicado que en la actualidad la asociación dispone ya de un local acondicionado que está ubicado en la calle San Cristóbal, en el barrio de San Miguel, y de siete trabajadores, todos discapacitados, al objeto de iniciar la actividad "cuantos antes".
De Miguel ha hecho un llamamiento al tejido empresarial, administraciones e instituciones para que aporten los 1.500 euros necesarios para conseguir los correspondientes visados que son necesarios para la obtención de los permisos de apertura y actividad comercial.
El proyecto de supermercado social surge como una iniciativa de integración social cuyos objetivos son potenciar las aptitudes de personas con pocas posibilidades de desenvolverse en el mercado laboral, formar y ocupar a personas desfavorecidas y limitadas por alguna minusvalía física o intelectual y ayudar a familias con pocos recursos económicos.
En cuanto a los destinatarios, De Miguel ha distinguido entre el ámbito laboral, apostando por personas discapacitadas y desempleados de larga duración, y los potenciales consumidores, todos con escasos recursos económicos "y que previamente serán evaluados por el personal social que certifique su estado económico y lo corrobore con un carné de usuario que le permita acceder a estos productos".
Consuelo de Miguel ha indicado que el proyecto cuenta con el beneplácito del presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y de la alcaldesa de Plasencia, Elia María Blanco.