El pozo se encuentra a 340 kilómetros de la costa de Sao Paulo, a una profundidad de 2.140 metros y en una de las zonas más prolíficas del mundo en recursos fósiles.
El consorcio tiene previsto perforar un nuevo pozo en los próximos días para confirmar los indicios detectados en Iguazú, que apuntan a que la bolsa de crudo ligero podría encontrarse a unos 4.900 metros de profundidad.
El lunes,
La actividad en la Cuenca de Santos es uno de los diez proyectos clave del plan estratégico de la petrolera para el periodo 2008-2012. La compañía se ha convertido en la segunda compañía de Brasil por dominio minero exploratorio en aguas oceánicas, sólo por detrás de Petrobrás.