Madrid y Barcelona son dos de los destinos europeos que más cayeron en julio con respecto al mismo mes del año anterior un 33% y un 35%, respectivamente, al pasar en el caso de la capital de los 134 euros en julio de 2008 a los 87 euros actuales, y de los 165 euros a los 110 euros en el caso de la Ciudad Condal.
Los precios hoteleros en Barcelona descendieron un 7,5% en julio con respecto al mes anterior hasta situarse en los 110 euros de media. Por el contrario, los precios de los hoteles en Madrid se sitúan en julio en los 87 euros por estancia, con una caída del 15,5%, y por primera vez en lo que va de año no superan los 100 euros.
GINEBRA, LA MÁS CARA EN EUROPA
En cuanto a Europa, las tarifas medias de los hoteles descienden un 10% en julio. La ciudad más cara del Viejo Continente es Ginebra, con un precio medio de 194 euros, la única de las analizadas que sube, un 2% más.
Le siguen Londres (156 euros), Venecia (146 euros), París (133 euros), Oslo (130 euros) y Roma (119 euros).
La caída más significativa es para Estocolmo que, en comparación con julio de 2008, recortó sus precios un 27%, pasado de los 162 euros en el mismo mes de 2008 a los 118 euros actuales. París y Roma registraron también importantes descensos con respecto a julio del año pasado con caídas del 15% y del 17%, respectivamente.
Los destinos turísticos europeos más baratos son Estambul (99 euros), Palermo (94 euros), Lisboa (88 euros), Berlín (87 euros) y Bolonia (85 euros).