Esta caída está justificada por el descenso de las transacciones en la vivienda nueva
Dichos descensos se producen después de haber iniciado el año con tasas positivas, al haber registrado un aumento del 10,5% en febrero y del 19,6% en enero, mes en el que se rompió la senda negativa que el indicador había experimentado en los cuatro últimos meses del pasado año.
En tasa intermensual (mayo sobre abril), la compraventa de viviendas experimentó un crecimiento del 27,8%.
De las 30.797 operaciones de compraventa de viviendas registradas en mayo, el 86,6% fueron sobre vivienda libre y el 13,4% sobre vivienda protegida.