De este modo, el FMI insta a las autoridades económicas a centrar su atención en asegurar la recuperación por lo que, a corto plazo, deberían adoptar un enfoque más audaz y proactivo para evaluar los riesgos de los balances que afectan a los bancos y tomar medidas para recapitalizar o reestructurar las instituciones viables y llevar a cabo un proceso de resolución bancaria en el caso de las no viables.
"La recuperación económica podría ser más débil de lo previsto si no se resuelven los problemas del sector financiero lo antes posible y de manera eficaz", señaló Belka.
"Únicamente aumentando las perspectivas de crecimiento a largo plazo de Europa se dejará atrás la crisis definitivamente. Para lograrlo, las autoridades económicas de los países avanzados deberían continuar con la reforma de los mercados de trabajo y de productos, mientras que las economías emergentes deberían centrarse en establecer un modelo económico que reequilibre las fuentes del crecimiento y del financiamiento", señaló el FMI.
RECOMIENDA A LOS BANCOS CENTRALES MANTENER LOS TIPOS BAJOS
En cuanto a la política monetaria, el FMI afirma que en las economías avanzadas puede haber margen de maniobra adicional a través de una señal "más contundente" de que se mantendrán las tasas de interés en niveles bajos y de que se ampliará la "distensión cuantitativa".
A este respecto, la institución internacional reconoce que estas políticas tienen sus costos y aumentan la posibilidad de perturbaciones en los mercados, así como el riesgo moral y la acumulación de riesgos en los balances de los bancos centrales, que ya se han aumentado considerablemente.
"Los bancos centrales deberían establecer una estrategia de salida y ponerla en práctica en cuanto la recuperación cobre firmeza", apunta el informe del FMI.