Elegir entre renta fija gubernamental y corporativa, Antón se queda con la segunda “mejor en high yield pues, aunque tiene mayor riesgo, los cupones son muy atractivos”. Este experto reconoce que las estimaciones de default de las empreas está en torno al 3-4% “que son los mínimos para este tipo de categoría y aquí puede haber oportunidades”.
Para un inversor de riesgo medio, este experto recomendaría un 30% en renta fija “dividido en emergente (5-10%), High Yield (10%) y el resto grado”.
Respecto al comportamiento de la renta variable global “hay que tener muy en cuenta los sectores: qué han estado haciendo y lo que representa para el fondo. El consumo ha sido el más beneficiado”. El
Respecto a la renta variable de Noruega “es de los pocos países que quedan con calificación crediticia de Triple A, una de las principales fortalezas que tiene es el petróleo y es una economía que apenas tiene déficit”. Realmente hay atractivo pero “recomendaríamos más hacerlo en la parte de renta fija”. Una de sus principales estrategias e ndivisas ha sido jugar el carry de la corona noruega frente a deuda. A la hora de invertir, Nordea tiene fondos de renta fija denominados en euros.
A la hora de fusionar fondos de inversión, Anton reconoce que “en primer lugar, cuando un fondo ha sufrido una pérdida de patrimonio los inversores se pueden ver afectados porque es más volátil y tiene mayores costes al hacer una transación. En ese caso, la gestora decide fusionar los fondos”. El segundo motivo es que no tiene sentido tener fondos con la misma política de inversión.