Con tiempo y espacio se ha podido comprobar que la amenaza de la crisis dubaití no afectará tanto a la economía estadounidense y que, incluso, los rescates podrían venir del propio país árabe calmando los ánimos en el resto del mundo. La tiritera por el miedo a otra crisis financiera ha pasado y las bolsas internacionales comienzan a asentarse de la mano del parqué estadounidense que ya ayer cerró en verde.


También desde el este hoy llegaron noticias importantes. El
Banco Central de Japón ha anunciado que dará liquidez a las entidades financieras niponas a través de una inyección de 115.100 millones de dólares. Su intención, frenar la deflación y la depreciación del yen, lo que podría influir en el mercado de divisas. Un mercado en el que, el dólar hoy se ha vuelto a debilitar ante la mejoría de la situación económica internacional. Esta mañana el euro se cambiaba a 1,5064 dólares y el billete verde a 87,05 yenes.

Ante la recaída del dólar, el oro gana brillo. El precio de este metal precioso ha marcado este martes un nuevo nivel récord: 1.199,25 dólares la onza troy.


Centrándonos en la economía yanki, hoy se ha conocido que las ventas minoristas crecieron un 5,2% en noviembre, mientras que la pasada semana experimentaron un descenso del 0,1%. Este último dato sorprende, ya que el Black Friday no impulsó el gasto familiar tanto como se esperaba.

En el apartado empresarial, por fin General Electric ha llegado a un acuerdo con Viviendi para hacerse con la participación que el conglomerado de medios galo tiene en NBC Universal. GE pagará a Vivendi 5.800 millones de dólares y ya pocos obstáculos tendrá que salvar para cederle en control de NBC a Comcast. Mientras todo se concreta, GE trepa un 1,69% en el DJ de Industriales, Vivendi cae un 1,85% en el Eurostoxx y Comcast sube un 2% en el Nasdaq GS.

Otro de los gigantes empresariales de América, AIG, ha acordado pagar a la Reserva Federal 25.000 millones de dólares de su deuda, reduciendo hasta los 17.000 millones el monto que todavía debe al organismo público. Una decisión que hoy premian sus accionistas con casi un 6% de subida del valor.