Los ingenieros de la compañía han rechazado la propuesta de inundar los reactores de la planta dañada, lo que podría bajar la temperatura en días en lugar de meses. Hasta que se normalice la situación de Fukushima
“El mayor problema son estas réplicas” ha declarado Zalenski. “Nunca sabes si puede haber más replicas o si la contención puede fallar” ha añadido. Tepco es reacia a inundar sus reactores porque el movimiento podría generar mala publicidad para la compañía. “La inundación podría incrementar la cantidad de agua contaminada que va al océano y también podría aumentar las posibilidades de que hubiera una explosión de hidrógeno dentro de la vasija de contención” ha afirmado Pierre.