Esta evolución de los gastos e ingresos financieros condujo a que el resultado ordinario neto registrara en 2008 una caída del 15,4%, frente al alza del 9,5% en 2007. Además, los resultados extraordinarios presentaron "significativas reducciones" en comparación con los "muy elevados" niveles alcanzados un año antes.
Sobre este particular, el Banco de España recuerda que las minusvalías registradas en el último trimestre de 2008 en algunas inversiones financieras, en los sectores inmobiliario y de telefonía, llegaron a absorber, dado su elevado importe, las plusvalías que en el primer semestre se contabilizaron por la venta de activos de Endesa a E.ON.
DESTRUCCION DE EMPLEO EN EL ULTIMO TRIMESTRE.
En otro orden de cosas, la creación de empleo atenuó su ritmo de crecimiento y se elevó un 0,4% en 2008, en comparación con el 0,7% de 2007, si bien se produjo una desaceleración a medida que avanzaba el ejercicio, de forma que en el último trimestre se contabilizó una tasa negativa (-1,4%). El empleo fijo creció un 0,5% a lo largo del ejercicio, pero en el caso de eventual bajó una décima.
Durante 2008, los gastos de personal aumentaron un 3,9%, ocho décimas menos que un año antes, como consecuencia principalmente de la moderación de las remuneraciones medias, que crecieron un 3,5%, cinco décimas menos que en el año anterior.
La contención de los costes salariales se explica en buena medida por la evolución en el último trimestre, en el que se registraron fuertes caídas de las retribuciones variables de algunas grandes empresas, en comparación con las devengadas el año previo.