La planta desalará agua de mar por ósmosis inversa. Se instalará en el Norte de Chipre y contará con financiación de los fondos de la Unión Europea.
La desaladora tendrá capacidad para tratar 24.200 metros cúbicos de agua al día y suministrar así agua potable a varias poblaciones del Norte de Chipre.
La filial de agua de Ferrovial ha logrado este contrato a través de una 'joint venture' en la que participa al 50% con la compañía Caramondani Desalination Plants.