En la reunión participaron los ministros de Economía, Karl-Theodor zu Guttenberg, de Finanzas, Peer Steinbrück, de Trabajo, Olaf Scholz, así como el vicecanciller y titular de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier. Una vez que haya vencido el plazo de presentación, el Gobierno "analizará con rapidez" los planes y posteriormente lo hará con los jefes de gobierno de los "Lander" que tienen plantas de Opel y con la casa matriz, General Motors, afirmó el portavoz del Gobierno, Ulrich Wilhelm, tras la reunión en la Cancillería.

Ni Wilhelm ni el portavoz del ministerio de Economía, Steffen Moritz, quisieron confirmar que los planes ya estaban sobre la mesa gubernamental, como había adelantado previamente el vice-portavoz de General Motors en Europa Christopher Preuss, quien aseguró que se han presentado tres ofertas. Aunque Preuss no quiso nombrar a los ofertantes, el grupo automovilístico italiano Fiat y el fabricante de componentes austríaco-canadiense Magna han hecho público su interés.

A estos dos candidatos se ha unido, según distintos medios, el inversor estadounidense Ripplewood. El Gobierno alemán no ha ocultado que preferiría un inversor industrial, con conocimiento de la materia, más que uno meramente financiero.

Guttenberg había adelantado el lunes que si alguno de los planes presentados convencía al Gobierno, era posible que una delegación gubernamental viajara todavía esta semana a Estados Unidos para negociarlo con la casa matriz General Motors (GM), y su principal acreedor, el Estado. Su portavoz subrayó hoy que la decisión definitiva la deberá tomar en cualquier caso General Motors, aunque añadió que el Gobierno alemán, como principal avalista de los créditos necesarios para la supervivencia de Opel, podría rechazar una opción que no le satisfaga.

Berlín ha propuesto un modelo de financiación transitoria para salvar los activos europeos de una eventual suspensión de pagos de la casa matriz, lo que en Europa prácticamente se da por hecho. La decisión sobre este problema deberá caer en el curso de la próxima semana pues el plazo dado por la Administración estadounidense a los acreedores de GM para aceptar el plan de saneamiento vence el próximo día 29.

El modelo alemán contempla la creación de una entidad fiduciaria que administraría el negocio mientras se ultiman los detalles con el inversor que haya ganado la puja. Guttenberg ha asegurado, sin embargo, que esta solución tan sólo se plantea en el caso de que haya una oferta que convenza, y no quiso excluir una suspensión de pagos de Opel.

Según informaciones del diario económico "Handelsblatt", el Gobierno alemán y los bancos han llegado ya a un acuerdo de financiación transitoria para el caso de que el asunto prospere, que consiste en ofrecer a Opel un crédito de 1.500 millones de euros para los próximos seis meses, que avalarían a partes iguales el Estado y los Lander con plantas de Opel.

El Gobierno regional de Renania-Palatinado, uno de los cuatro Lander alemanes con fábricas, confirmó hoy que está dispuesto a participar con 100 millones de euros en el paquete de ayudas. El ministro de Agricultura de ese Land, Hendrik Hering, incluso fue más allá en sus informaciones, al asegurar en declaraciones radiofónicas que el fabricante Magna es el que tiene las mejores opciones de poder adjudicarse Opel, dato que contrasta con las declaraciones del portavoz del Gobierno alemán, quien aseguró que "no hay favoritos".

En términos similares se ha expresado el presidente de General Motors Europa, Carl-Peter Forster, quien en una entrevista que publicará el viernes la revista "Autor motor und sport" sostiene que la compañía no tiene ningún tipo de preferencias.