Ante la cercanía del título a su objetivo el experto no recomienda tomar posiciones a corto plazo por el escaso margen que presenta. Sin embargo, a largo plazo hay que tener en cuenta que la que fue directriz bajista se puede convertir en soporte, por lo que si el valor retrocede hasta dicha zona “serían unos buenos precios para entrar”.
No obstante si algún inversor se quiere aventurar a la continuidad del segundo rebote alcista, “debería retrasar la compra hasta los 9.65 euros y saber que en la zona de los 10 euros encontrará dificultades”.