Esta evolución se explica, sobre todo, por el aumento del déficit comercial y de rentas
y, en menor medida, por la ampliación del saldo negativo de transferencias corrientes y por la reducción del superávit de servicios.

El déficit de la balanza comercial se situó en marzo de 2011 en 4.503,4 millones de euros, frente a 3.772,7
millones en el mismo mes de 2010.

En marzo de 2011, el superávit de la balanza de servicios
retrocedió hasta 1.730,4 millones de euros, frente
a 1.819,9 millones en el mismo mes de 2010.

En el primer trimestre del año 2011, el déficit acumulado de la balanza por cuenta corriente experimentó un
moderado aumento, hasta 17.715,5 millones de euros, desde los 15.934,4 millones registrados en 2010. Este
incremento se debió al avance del déficit de rentas y a la ampliación del saldo negativo de la balanza comercial,
que compensaron el aumento del superávit de servicios y la reducción del déficit de transferencias corrientes.