Apunta que la “atractiva exposición geográfica de ACS lleva a que un 40% de sus ingresos proceda de Norteamérica y la región de Asia Pacífico representó el año pasado un 28% total de las ventas. Por su parte, en estos momentos Europa solo genera una cuarta parte de los ingresos. Aunque la exposición al sector minero australiano le pasó factura a los beneficios del primer trimestre, es cierto que esto más que se compensó con la filial de Norteamérica”, dicen.

 
Los analistas explican que la compañía de construcción e infraestructuras se va a beneficiar del contexto de bajos tipos de interés. “El tamaño y la exposición global significa que la compañía está bien posicionada para beneficiarse de cualquier aumento de la inversión en infraestructuras”.
 
Por si fuera poco, la cartera de proyectos de la empresa está valorada en 67.000 millones de euros, lo que le daría una visibilidad de casi dos años, lo que es beneficioso para la estabilidad del valor.
 
Además, la compañía ha reducido recientemente su nivel de endeudamiento “y aunque la deuda neta sigue siendo significativa, el efectivo le proporciona una liquidez adecuada”, dicen.
 
En una reciente nota a los clientes, los expertos explican que mantienen una recomendación de compra de este valor con un precio objetivo de 31,50 euros por acción, frente a los 33,5 euros anteriores.

ACS

 
Apuntan que “los riesgos de esta inversión sería una recesión económica y su aspecto en la industria de la construcción”.
 
Los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión le dan al valor cuatro puntos en una escala que va del 0 al 10 y que sitúan a ACS en fase de rebote. Una de las métricas más atractivas es la tendencia a largo plazo del valor, que es alcista.

ACS

Lea aquí todos los análisis de ACS
%%%Indíquenos si quiere recibir alertas de ACS|ACS%%%