Una de las principales claves de la Bolsa española en este sentido es el enorme entramado de participaciones bancarias y empresariales. El entramado de participaciones, que en una época, como la actual, de sequía de liquidez puede entrañar problemas añadidos de largo alcance y, por derivación, resaltar más la figura de los bancos frente a los títulos industriales. Es decir, justo lo contrario de lo que figura en la mayor parte de los informes de estrategia de las principales firmas del mercado.
La mitad de las empresas del Ibex 35 participan en el capital de otras empresas de la bolsa española, incluida la otra mitad del Ibex. Lo peor es que es mezcla se produce de manera aleatoria, porque muchos cruces son contra natura, bien en empresas filiales, bien en compañías ajenas a su negocio.
“¿Bancos?, No Gracias”, se ha repetido de manera metódica en todos los informes de situación, pero son los bancos los que han sacado al mercado del atolladero. Además, los reguladores les han extendido una alfombra, la de las pruebas de estrés. El Comité de Supervisores Bancarios Europeos (CEBS), con sede en Londres, ha publicado una lista de 91 bancos que están siendo sometidos a los llamados tests de estrés, entre los que figuran 27 bancos y cajas de ahorros españoles y cuyo resultado se dará a conocer el 23 de julio.
El resto de la lista la componen catorce institutos alemanes, seis griegos, cinco italianos, cuatro franceses, británicos, holandeses, portugueses y suecos, tres daneses y dos de Austria, Bélgica, Chipre, Hungría, Irlanda, Luxemburgo y uno de Malta, Eslovenia, Polonia y Finlandia.
El objetivo del test es analizar la resistencia del sector bancario europeo y la capacidad que tienen bancos concretos de aguantar nuevos riesgos en el mercado, incluidos los soberanos, así como determinar su actual dependencia del apoyo público.
Los nueve bancos españoles examinados son: Santander, BBVA, Banco Popular Español, Banco de Sabadell, Bankinter, Banca Cívica, Banco Pastor, Banca March y Banco Guipuzcoano.
A ellos se suman dieciocho cajas:
¿Y saben lo que va a pasar? Nada que haya que temer. Ya nos lo han contado los analistas de Credit Suisse, que creen que los stress test no defraudarán al mercado ya que no es probable que se anunciaran si fueran a decepcionar a los inversores. El hecho de que se estén implantando los stress test es algo positivo. Se espera que también se anuncien planes de reestructuración o ampliaciones de capital si algunos de los bancos fallan las pruebas.
Moisés Romero. www.lacartadelabolsa.com