En este entorno, la renta variable japonesa
puede ser una opción táctica, pero para inversores con perfil arriesgado que puedan asumir la volatilidad de este activo. Esta corrección puede generar una oportunidad para tomar posiciones en la renta variable japonesa, pero como algo táctico y, en el momento en que tenga otro tirón hacia arriba, deshacer posiciones.

Entre los fondos de volatilidad hay que diferenciar:
- Los fondos de arbitraje: toman posiciones largas y cortas en la volatilidad de ciertos activos. Estos fondos, en los últimos años han tenido un comportamiento muy plano o, incluso ligeramente negativo, debido a que la volatilidad ha sido muy baja. La poca rentabilidad que se obtenía con algunas de estas apuestas era contrarrestada por los costes operativos
- Los fondos direccionales: una volatilidad tan estable hace que la gestión de éstos sea compleja y tampoco han tenido un buen comportamiento.
La historia nos dice que los fondos de volatilidad han funcionado bien en momentos de volatilidad extrema, como en 2008.

La renta fija en el último mes ha sufrido un fuerte castigo, especialmente la soberana, afectada por una posible salida de la política monetaria de la Reserva Federal de EEUU, los programas del Banco de Japón y algunos datos macro. Esto ha dado lugar a la venta masiva de deuda. Los bonos ligados a la inflación y deuda emergente han sufrido un fuerte correctivo, mientras que el crédito se ha comportado relativamente bien, especialmente el high yield. A nivel deuda gubernamental, pensamos que este año vamos a encontrar oportunidades en deuda periférica, especialmente española e italiana, que no han corregido tanto.

Los mercados frontera son los próximos emergentes, son países que no se encuentran en una fase de desarrollo como los emergentes, pero que en algunos casos tienen un potencial de desarrollo igual o superior a estos. A esto hay que unirle que tienen unos niveles de deuda sobre el PIB bajos y una creciente clase media y una población joven importante. Estos son los atractivos de estos mercados y nos recuerda a la historia de los mercado emergentes de hace 10-15 años. A la hora de elegir un mercado, hay que tener en cuenta el perfil del inversor, pues no son muy líquidos, la capitalización bursátil es muy baja, la liquidez es baja y, en algunos casos, también hay limitaciones para los inversores internacionales. También es verdad que en el último mes han experimentado una descorrelación con otros mercados.
Una recomendación de fondos de mercados frontera sería el Templeton Frontier Markets, que tiene la peculiaridad que, desde hace dos semanas, sólo permite que inviertan en él los inversores que ya tienen participaciones; y el Schroders Frontier Markets.

Tras un año y medio en el que la renta fija ha funcionado genial, ahora conseguir rentabilidades atractivas es cada vez más complicado y supone asumir más riesgo. Muestra de ello es lo que ha pasado en el último mes. Por ello, nuestra idea es tener una cartera diversificada, con una parte de liquidez que pueda compensar el riesgo con nuestras exposiciones a renta variable, que es donde vemos más valor, y a bonos periféricos.