Si hay un mercado en el que la tensión está a la orden del día es el mercado de divisas. Y es que “son varios países los que quieren evitar una apreciación de su divisa”, reconoceAshraf Laidi, director de estrategias de mercado de CMC Markets en Londres
. ¿Dónde comienza esta “guerra de divisas”? “No sólo tiene su origen en el Banco de China con su política de mantener un Yuan lo más debilitado posible, sino que el verdadero impulsor es la propia Reserva Federal de Estados Unidos y su nueva política monetaria de inyección de liquidez -va a comprar cada mes aproximádamente entre 100,000 y 200,000 millones de dólares de Treasury bonds-.

Y es precisamente esta política de Estados Unidos lo que va a provocar “un mayor debilitamiento del dólar frente al resto de las divisas como la libra o el euro, además del resto de divisas asiáticas o latinoamericanas, cuyas autoridades monetarias harán todo lo posible para evitar una apreciación excesiva de sus divisas que les reste competitividad”. Lo que está haciendo la Reserva Federal -continúa- “es exportar deflación a todas esas economías”. En cualquier caso, podríamos hablar de “guerra de divisas” si EE.UU. logra aprobar la ley proteccionista en el congreso que gravaría las importaciones chinas en un 27%, una medida que creo improbable que pueda aprobarse, pero en el hipotético caso de que ocurriese ahí sí que estaríamos hablando de “guerra de divisas”.


En lo que respecta a la intervención del Banco de Japón y a nuevas intervenciones en el yen, Laidi recuerda que se trata de una medida histórica en todos los sentidos. “La principal razón de que el yen continúe su crecimiento y de que además pensemos que va a seguir al alza, y que cualquier debilidad en esta divisa sería temporal es porque como el propio Banco de Japón ha dicho que va a utilizar no más de 5 trillones de yenes en términos de distribución monetaria en la intervención”. Aunque más que intervención, Laidi, considera que es se trata de “una política easing: una cantidad que no llega a 65.000 millones de dólares, que es mucho menos que lo mínimo que está inyectando la FED, que son 100.000 millones”. Este hecho, explica el director de estrategia de CMC Markets va a tener “como consecuencia un impacto negativo mucho mayor en el dólar americano que en el yen. Por lo que muy probablemente Japón tenga que empezar a comprar stocks, como ya hizo en 2004”.

“Es probable que haya una intervención por parte de China”, apunta Laidi. Este experto cree que “es muy probable que el gigante asiático suba los tipos de interés, tensione la política monetaria lo que derivará en un “rally” gradual de subida del yuan”. A modo de ejemplo, Laidi muestra el gráfico semanal del yuan frente al yen y afirma que “el yuan chino en 2008 estaba alrededor de los niveles de 16.000 yenes, y descendió hasta los niveles de 12.000 yenes por yuan”.

“Tal y como se puede ver en el gráfico, los máximos históricos de la divisa china fueron aproximádamente en el 2008 y se puede ver que desde el 2008 ha caído desde más de 16000 yen hasta 12000, un 25% por lo que definitivamente el primero se está debilitando frente al yen, por lo que el yen se está fortaleciendo contra el yuan y contra otras divisas, y creo que podía probar un nivel inferior al 12%.

¿Cómo puede cambiarse esta tendencia? Laidi explica que hay dos posibilidades. “Una es mediante una agresiva y fuerte intervención por parte del banco central japonés, y también una política monetaria restrictiva por parte del banco central chino, la cual ayudaría un poco al yuan”. De lo contrario -apunta- “si este debilitamiento siguiera presente, tendríamos un problema, porque China actualmente se encuentra comprando bonos emitidos por el gobierno japonés como parte de su proceso de convertir las reservas que tenía invertidas en dólares, por lo que esto último parece ser la principal causa del fortalecimiento del yen”.

Euro-dólar: 1,40, zona de orden de compra

La moneda de la zona euro sigue fortaleciéndose frente al billete verde. El par “ha roto por encima del 1.39, esto es muy importante ya que es lla media móvil semanal de 200 sesiones, la cual va dentro del retroceso de fibonacci, de 1.39 al nivel 61.8% rompiendo por encima de este”. Por lo que ahora mismo -continúa- “cabría la posibilidad de cierta resistencia alrededor de estos mínimos, por lo que diría que el nivel de resistencia se sitúa en la zona de 1.41 unidades”.

Haciendo referencia al gráfico estocástico, “podremos detectar el potencial o negativa divergencia bajista”. “Los estocásticos semanales o estocásticos lentos señalan mínimos, por lo que el euro da señales de recuperarse, así que debemos estar atentos a una posible corrección a la baja.” A pesar de ello, “yo no me preocuparía por una caída del euro hasta que no hubiese una corrección por debajo de este nivel”. “Este es un nivel muy importante, el cual fue alcanzado el 10 de septiembre, si dibujamos una línea de tendencia y esta semana se alcanzaron niveles por debajo de la línea de tendencia, ,pero nunca se rompió el nivel”. Por eso, “hay que tener cuidado, porque el euro respeta los niveles técnicos. Mientras no se cierre durante esta semana o la próxima por encima del 1.40 estaríamos a salvo.”

Sólo me preocuparía -señala el experto- “por aquellas posiciones compradoras por encima del 1.36, básicamente creo que el euro está en forma y probablemente entraría, pondría una orden de compra a 1.40, con un stop alrededor del 1.3920 1.3930, esperando como objetivo un movimiento hacia el 1.4180”.