La actualidad se centra en el acuerdo de la OPEP de recortar la producción de petróleo. La primera reducción desde 2008. Después de la gran sobrerreacción del crudo, ¿considera que puede venir alguna corrección en el corto plazo una vez que se termine por digerir? ¿Dónde ve su techo?

Podríamos tener un comprar con el rumor y vender con la noticia. Efectivamente podría haber una pequeña corrección. Si recapitulamos lo que ha pasado en los últimos días, la cotización del petróleo en el entorno de los 50 dólares creo que descontaba que iba a haber un acuerdo. A finales de la semana pasada tuvimos una fuerte caída del petróleo. Siguió cayendo lunes y martes cuando las expectativas se enfriaron. Antes de la reunión el mercado daba un 50% de posibilidades de que hubiera un recorte. Al final lo ha habido. Más o menos de lo que se preveía, del 1% de la producción mundial de petróleo. 1,2 millones de barriles diarios de la OPEP dejando la cifra de producción del cartel el 32,5 millones de barriles. Es un acuerdo que no es sorpresa y muy en línea con lo que se había negociado previamente en la cumbre informal en Argel. Esto supone que la oferta se va a congelar o a reducir ligeramente en máximos históricos, en unos niveles muy elevados. Sigue habiendo una abundancia y una sobreoferta de petróleo en el mercado muy importante. Por otro lado, tenemos que con un dólar apreciándose es un freno a cualquier subida del petróleo, de tal forma que más allá de que haya un recorte puntual, una recogida de beneficios, para mí no cambia demasiado el rango de cotización del petróleo, que lo sigo viendo entre 45 y 55 dólares en el medio plazo. La OPEP lo pretende situar entre 55 y 60 dólares. Lo veo difícil. Más bien creo que este precio en torno a los 50 dólares, ligeramente por encima y por debajo es su precio objetivo para los próximos seis meses.

Ahora los mercados se centran también en el referendum italiano del próximo domingo. ¿Puede provocar nuevas convulsiones en los mercados si sale el NO, principalmente en los europeos?

Las va a provocar. Es un poco curioso lo que ha pasado con los activos italianos estos dos últimos días cuando han subido con mucha intensidad. La bolsa italiana desde el cierre del lunes gana el 4%, siendo la mejor bolsa de Europa con diferencia. Eso no cuadra demasiado con cuáles son las expectativas que hay con ese referéndum, que son bastante pesimistas. Mis compañeros de IG en Italia han elaborado un informe incorporando distintas variables y ellos llegan a la conclusión de que hay un 60% de posibilidades de que salga  NO. Es la opción favorita, así lo muestran las encuestas y las casas de apuestas. En gran parte así lo tenía descontado el mercado hasta esta última subida de la bolsa italiana que yo no he entendido demasiado bien con un rebote de su sector bancario. Posiblemente había mucha especulación y posiciones cortas que han salido esperando a ver el resultado. Lo más probable es que salga NO. Ahora la duda es si va a dimitir Mateo Renzi. Él ha prometido hacerlo aunque es posible que el presidente de la república no la acepte y que le pida que siga en el cargo hasta que haya menos peligros y haya avanzado más la reestructuración del sector bancario. Eso podría ser a la postre una buena noticia para la bolsa italiana, que tiene en gran parte descontado que va a salir el NO. Si sale esto creo que vamos a tener una caída, pero tengo dudas de que sea demasiado dramática. La pelota se va a jugar en el campo de si Renzi continúa o hay nuevas elecciones en Italia con la posibilidad de que el movimiento Cinco Estrellas aumente su cuota de poder y eso sería lo que creo que combinado provocaría un gran daño. Si Renzi realmente pierde el referéndum y dimite, con una nueva convocatoria electoral, eso sí haría mucho daño a los activos italianos y por ende al sector bancario español y al europeo.

Se habla de la rotación sectorial para el próximo año con la llegada de Donald Trump. Después del cambio de escena que hemos tenido. ¿Cree que habría que apostar de cara al 2017 por valor relacionados con las infraestructuras, con el petróleo o bancarios?

En Estados Unidos el sector financiero sí. En Europa yo no lo veo nada claro. El sector industrial en Estados Unidos sí y también en Europa, el sector constructor también. Me parece que globalmente se va a beneficiar y luego hay un sector que es un claro ganador de la victoria de Donald Trump que es el de materias primas y recursos básicos. Las subidas de las acereras ya las hemos visto en el Ibex 35. Creo que ahí habría que estar con el triunfo de Donald Trump.

Además también tenemos que estar pendientes del mercado de las divisas con las próximas visitas de los bancos centrales. ¿Ve más recorrido a la baja en el euro con respecto al dólar?

La Fed va a subir los tipos de interés seguro y creo que no va a tener capacidad para mover al dólar. Pienso que es algo que está bastante descontado. Se va a mover más por el lado del euro. Tenemos el referéndum italiano, que es vital. Si sale el no es un motivo claramente bajista para el euro. Si dimite Renzi, más. Además tenemos una reunión del BCE la próxima semana. Sobre esa sí que no está nada claro lo que va a pasar. Sobre la Fed si está claro que van a subir los tipos de interés. Pero el BCE la próxima semana es posible que prolongue el QE durante seis meses más porque va a presentar el cuadro macroeconómico revisado para los próximos trimestres. Por tanto, esta sí que es una reunión importante. Para mí mucho más que la de la Reserva Federal. Creo que no tiene capacidad de sorprender al mercado. Si sale el NO en Italia y dimite Mario Renzi y la próxima semana el BCE prolonga el QE, eso van a ser tres impactos muy bajistas para el euro. Eso aceleraría el acercarnos a la paridad en las próximas semanas o dos meses. Por el contrario, si el referéndum en Italia al final se gana, creo que el euro va a tener una fuerte recuperación y podemos volver a ver niveles en el entorno del 1,10. El euro se juega mucho en el referéndum de Italia. Si eso pasa, y el euro tiene un rebote hacia el 1,10, me parece que es una muy buena oportunidad para vender el par. En general cualquier rebote del euro-dólar lo aprovecharía para volver a tomar posiciones cortas en el par. Más allá de eso, la paridad, que es ahora el debate, si pasan estas tres cosas que he descrito la podríamos ver a principios del próximo año; si no es así no está tan claro que vayamos a ver la paridad tan próximamente. Cuidado con la paridad porque para esto tiene que haber dudas sobre la integridad del euro y en segundo lugar las políticas monetarias de los bancos centrales tienen que divergir mucho más de lo que hasta ahora divergen.

¿Sus recomendaciones para 2017?

Empiezo diciendo que 2017 en general me parece que tiene un esquema de partida relativamente parecido a 2016. Creo que va a ser un año para para dinamizar carteras. Habría que comprar tras correcciones y vender tras rebotes. Esa receta en 2016 con muchos índices europeos como el Ibex en negativo y otros índices con comportamiento muy discreto han podido ser la clave para completar un buen año bursátil. Con lo que he dicho antes creo que hay que estar en las empresas de recursos básicos: ArcelorMittal y Acerinox me parecen dos apuestas muy interesantes para hacer cartera. Otros valores que me parecen interesantes son Mapfre, que lo está haciendo muy bien en los últimos meses; Viscofan, que en los últimos tiempos está mostrando síntomas de recuperación. En el mercado continuo Sacyr me parece muy interesante y con más elasticidad a lo que haga el petróleo que Repsol. Empresas muy exportadoras que se puedan beneficiar de las caídas del euro. Ahí es dónde hay que estar.