El mercado y la economía han permanecido a la expectativa en los últimos meses. El volumen de contratación en los grandes activos, financieros o no, ha ido disminuyendo hasta alcanzar niveles de actividad bajos no vistos en los últimos años. De forma paralela, la economía ha perdido ritmo con los índices de actividad empresarial aproximándose a zona de contracción y