Hecha esta autocrítica, me venía a la cabeza un fondo que sí que es una leyenda. Y leyenda viva, porque el fondo, con casi un siglo de historia, sigue dando de qué hablar. Se llama Investment Company of America (ICA). Lanzado en 1934, apenas un año después de que Franklin D. Roosevelt pusiera en marcha su New Deal, este fondo nació con vocación de invertir a largo plazo en compañías estadounidenses sólidas, rentables y capaces de pagar dividendos de forma sostenible. Y así lo lleva haciendo casi 100 años después.

Como es mucho lo que tenemos que contar, lo haremos en dos artículos. Pero, ante de seguir quiero mostraros un gráfico.

Fuente: elaboración propia con datos de Capital Group

Si invertiste 10 mil dólares en el lanzamiento de la estrategia, hoy tendrías la friolera de más de 346 millones. Vale, que es muy largo plazo. Pero no está mal, ¿eh? Sobre todo, teniendo en cuenta que comparando con el S&P 500 TR, la rentabilidad es mucho mayor; mucho. Y no han sido momentos de calma. Numerosísimas crisis, con Guerra Mundial incluida… El fondo ha ido de la Gran Depresión a la IA, pasando por mil vicisitudes en el camino.

ICA no es solo uno de los fondos más antiguos del mundo; es también una de las estrategias más consistentes en renta variable americana. Su gestora, Capital Group, es hoy la mayor firma de gestión activa del mundo y la gestora activa de renta variable americana más grande, con más de 1,3 billones de dólares (trillones americanos) bajo gestión en US equities.

A lo largo de sus 91 años, como decíamos, el fondo ha pasado todo tipo de ciclos: guerras, crisis energéticas, inflación galopante, burbujas tecnológicas y pandemias. Y lo ha hecho con una rentabilidad anualizada del 12,1%.

ICA no mira el corto plazo y busca empresas que puedan generar valor a lo largo del tiempo. Su cartera está compuesta mayoritariamente por compañías que pagan dividendos (alrededor del 80%), y no es casualidad.

El dividendo, muchas veces visto como un extra, aquí es parte esencial del motor de rentabilidad. En román paladín: si reinviertes los dividendos y reduces las caídas en los mercados bajistas, te colocas en mejor posición para beneficiarte de la recuperación. Es el efecto bola de nieve, o como decía Einstein (aunque en realidad es una frase que seguramente nunca dijo), el interés compuesto es la octava maravilla del mundo.

Ejemplos como Philip Morris o BAT, que ofrecen rentabilidades por dividendo del 3% al 7%, se combinan en cartera con otras más centradas en el crecimiento como Microsoft, Uber o GE Aerospace, generando un equilibrio entre defensiva y ofensiva.

ICA se gestiona bajo el llamado "sistema Capital" (como todos los fondos de esta gestora), un modelo que divide la gestión del fondo entre varios gestores independientes, cada uno con su propio estilo y convicciones, pero compartiendo una misma filosofía. Esto aporta diversificación interna y estabilidad, reduciendo el riesgo de decisiones extremas o de dependencia excesiva de una sola visión. Además, la retribución de estos gestores depende de la rentabilidad del fondo, pero a bastante plazo (llegando a una ponderación incluso a 8 años).

El resultado es una cartera de convicciones donde el 59% de las compañías lleva más de 5 años en cartera, y donde las decisiones se toman con horizonte de largo plazo, no con la lupa del trimestre.

Lo que más llama la atención del comportamiento histórico de ICA es su capacidad para proteger en los momentos complicados. En los mercados bajistas, su sesgo a compañías de calidad y su enfoque en dividendos actúa como un airbag. Y cuando el mercado se recupera, también participa, aunque sin sobresalir. No me canso de repetir en los artículos que, si caes menos, es más fácil recuperar y obtener mayores rentabilidades… Y no me resisto a ponerle cifras. En caídas (a 5 años) suele capturar un 85% y en mercados alcistas un 98%. Pero si nos vamos a verlo desde 1934, veremos que la captura de caídas apenas supera el 50%.

Esto ha permitido que, en periodos de alta volatilidad como 2022 o durante los primeros compases de 2025, ICA haya ofrecido retornos ajustados al riesgo superiores a los de su categoría, con ratios como el Sharpe en el top decil a 3 y 5 años. Y en primer cuartil de rentabilidad a 1, 3 y 5 años. Me corrijo, porque no solo es primer cuartil, sino el mejor fondo en cuanto a rentabilidad a 3 años.

No me quiero enrollar, así que lo dejamos para otro artículo. Pero hay tantas cosas que se pueden contar de este fondo… En el siguiente y, una vez presentada la estrategia, ya nos meteremos en plazos no tan largos, en su posicionamiento actual y por qué pienso que es un buen momento para entrar en él.