El metal ha alcanzado su nivel más alto desde 2011 y al tener una relación inversa al dolar norteamericano y bajo una expectativa de debilidad en el billete verde es un puntal para este metal. Otro factor a considerar es el movimiento u operaciones corporativas que ha habido en el sector. El segundo trimestre del 2020 estuvo marcado por una aceleración en las operaciones corporativas mundiales de oro, con 12 transacciones (superior al promedio trimestral histórico) y con valor de 2,86 mil millones de dólares, y es de esperar que este movimiento continúe.

Los precios del oro se han mantenido firmes hasta junio, y durante el trimestre terminaron subiendo hasta aproximarse a los niveles máximos de 2011 de 1.800 USD/oz. La rentabilidad anual es cercana al 20% y hace pensar a muchos inversores que van tarde. Para la segunda mitad del año se espera que el precio del metal siga siendo un catalizador que impulse mayores fusiones y adquisiciones.

A pesar del vaivén que los mercados han vivido durante esta primera mitad del 2020, la actividad corporativa en el sector mundial del oro se aceleró en el 2T20, con el anuncio de doce transacciones (el número más alto de transacciones desde el 4T12) y con un valor total de las transacciones que casi duplica aquellas del 1T20.

Normalmente las transacciones de M&A se aceleran en momentos de precios boyantes del oro. La transacción más destacada ha sido la de SSR Mining con Alacer Gold, anunciada el 11 de mayo de 2020 por un valor de 1,71 mil millones de dólares.

Entre las otras transacciones que se dieron destaca el fuerte apetito de las empresas chinas por hacerse de activos mundiales de oro. Así Shandong Gold y Zijin Mining, compraron tres compañías con activos en Canadá, Ghana y Guyana. Mientras que los principales productores de oro han estado ausentes en esta vorágine de M&A. Sin embargo, aquellos de tamaño menor se unen para crear nuevos productores de tamaño medio, tal es el caso de SSR Mining y Alacer Gold, así como Kopy Goldfields adquiriendo a Amur Gold.

 

Después de años de baja inversión, se observan perfiles de producción bajo presión y reservas en declive. La perspectiva para el precio del oro en la segunda mitad del año es favorable, y una mayor consolidación del sector son catalizadores para tomar en cuenta. Además, según muestran los datos semanales de flujos, durante la primera semana del 3T20 entraron 2.400 millones a activos de oro a nivel mundial, con lo que ya alcanzan máximos históricos.

Entre los fondos de renta variable que invierten principalmente en empresas mineras y que concentran inversión en oro, aunque también en otros metales como plata, platino y otros metales preciosos, y que mejor desempeño han tenido están:

Nos centraremos en le fondo de Lombard Odier, que en lo que va del año es de los de mejor desempeño y a 12 meses de los primeros. Se trata de un fondo de gestión activa, y cuya estrategia está vigente desde 2003. Es gestionado por VanEck (gestora con sede en Nueva York), un experto en la selección de valores mineros de oro y también de materias primas. Su objetivo es superar la rentabilidad del índice NYSE Arca Gold Miners en el largo plazo. La cartera puede estar integrada entre 45-65 posiciones de empresas mineras de oro. Es un fondo de alto riesgo, con una volatilidad anualizada del 39,76% y con una caída máxima del 39,14%. Tiene un ratio de Sharpe similar a su referencia (0,4) y un tracking error de 8,05%.

Su posicionamiento sectorial es del 94,7% en oro y del 3% en metales preciosos, principalmente.  En cuanto a la exposición por países, el gran peso (67,3%) está en Canadá, seguido por casi un 20% en Australia,  algo más del 7% en EE.UU., 3,2% en Sudáfrica y 0,9% en Mónaco, con una liquidez del 0,9%.

Sus 10 principales acciones en cartera son:

Este fondo no mantiene posiciones en Latinoamérica, lo cual es favorable por el momento. Es uno de los continentes con mayor riesgo de decepciones en el reporte de resultados empresariales trimestrales dada la escalada en las restricciones operativas en países como Perú o México. De hecho, recientemente Hochschild tomó la decisión de detener por completo sus operaciones mineras en Perú, al dar positivo por Covid-19 algunos de sus trabajadores.

La cautela es buena consejera en estos casos, ya que muchas acciones han subido más del 30% en el año, y más del 80% desde los mínimos de marzo. Sin embargo, según comenta Schroders en un informe trimestral, al observar la relación del índice de mineras de oro FTSE y el precio del oro, queda claro que hay mucho recorrido de largo plazo para el sector, hasta alcanzar el terreno perdido en la década 2005-2015.