El decisivo cambio de orientación de la política monetaria por fin reavivó el interés de los mercados por China, pero el crecimiento de la economía y los beneficios únicamente se materializará si a continuación las autoridades elevan el gasto público.
La Reserva Federal (Fed) dio el pistoletazo de salida a su clico de recortes de tipos durante la última reunión de septiembre, al bajar su tipo de interés oficial en 50 puntos básicos (pbs) y situarlo entre el 4,75% y el 5%.
Analizando el escenario económico global, es probable que cuando EE. UU. reduzca los tipos de interés, las compañías chinas se vean tentadas a vender un billón de activos denominados en dólares reforzando así el yuan. Además, siendo una divisa de mayor riesgo, prevemos que el yuan pueda adquirir un papel protagonista en los mercados, apreciándose.
El yen japonés alcanzó máximos de siete meses frente al dólar el lunes, mientras los operadores se deshacían de sus operaciones de “carry trade” después de datos económicos de la semana pasada, que aumentaron las perspectivas de una desaceleración económica en Estados Unidos y de mayores recortes de tasas por parte de la Reserva Federal, volviendo a sacar a la luz la palabra recesión.
Desde Fidelity International señalan que el 2024 será un periodo de "estabilización controlada" en China y que el riesgo mantiene su atractivo gracias a la fortaleza de las economías de todo el mundo. Además, adviertes de que algunas regiones están empezando a tomar caminos divergentes y a generar oportunidades específicas.