La variación del precio del crudo y en especial del Brent de referencia en Europa, marca en estos momentos las claves de la evolución de los mercados financieros globales. Los recortes de suministros hacen pensar que podría llegar una recesión, mientras que los avances económicos fomentan su precio y lo aplaude el mercado, mientras las compañías petroleras hacen el agosto en mayo.
El analista técnico Roberto Moro analiza la situación de los índices bursátiles en este momento y ve un escenario muy bajista tanto en Wall Street como en Europa. Moro tampoco ve valor en el petróleo y cree que la plata es una de las pocas opciones a tener en cuenta desde el punto de vista comprador.
El coste del crudo se estabiliza en zona de elevados precios, superiores para el brent a los 100 dólares el barril, mientras las empresas del sector avanzan en el mercado. Tras subsidiar los gobiernos de media Europa hasta junio los carburantes, la gran pregunta es, si como dicen los expertos, la complicada situación llevará de nuevo a encarecimientos del petróleo en la segunda parte del año.
El metal precioso parece querer volver sobre el soporte de los 1900 dólares, aunque ayer volvía a perder posiciones, tras los recortes implementados durante la pasada semana. Pero factores como la situación en China agravada por los nuevos casos de Covid y presuntos nuevos confinamientos, han elevado su tono en los últimos días, aunque sin demasiada fuerza.
El metal precioso vuelve por donde solía para luego retroceder tras lograr sus máximos de las últimas cinco semanas. Volvía a resurgir en el ideario de los inversores como el auténtico refugio en estos tiempos de incertidumbre geopolítica y más que elevada inflación, con una guerra que se alarga y a la espera de que se concreten los resultados empresariales que ya se han comenzado a publicar.
El precio del crudo sigue más que elevado en los mercados internacionales, aunque con caídas pronunciadas en la última semana y de menor cuantía en el último mes desde los máximos registrados hace ahora 30 días. Los expertos consideran que el alivio anunciado por Estados Unidos y la AIE servirá como aliciente, pero donde de verdad se concentran es en el futuro: con las posibles sanciones contra el petróleo ruso.
El precio del barril de petróleo ha comenzado la sesión de este jueves con caídas cercanas al 5% tanto en la variedad Brent como en la West Texas Intermediate (WTI) ante las informaciones que apuntan a que Estados Unidos volverá a liberar parte de sus reservas y a la expectativa de la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros productores.
Nadie duda de que los precios del petróleo a niveles por encima de los 100 dólares el barril podría permanecer más tiempo entre nosotros del esperado. El crudo de hecho se ha convertido en uno de los promotores más decididos de los movimientos que viven estos días los mercados de renta variable, uno de los asuntos a los que más atentos serán las bolsas mundiales esta semana. Sobre la mesa está además si esos precios podrían llegar a doblarse.
El crudo retrocedía desde sus máximos a doble dígito, para luego darse la vuelta, ante el aumento de la incertidumbre sobre Ucrania y deja de lado el respiro a la economía mundial de la mano de varios factores. Vuelven los malos presagios sobre la Guerra tras un fallido principio de alto el fuego, China recupera la actividad, aunque parcialmente. Así el petróleo vuelve a complicar la vida a los países occidentales.
El auténtico refugio ha llegado para quedarse marcando nuevos máximos históricos en la última semana y muy atento en la presente a dos factores: la reunión de la FED y, sobre todo, a lo que acontezca en la invasión de Rusia sobre Ucrania que entra en su 20º día en esta jornada. Una de las incógnitas será saber si podrá volver sobre los 2.000 dólares, tras perder casi todo lo ganado desde la guerra.