En el centro de la crisis monetaria holandesa se encuentra la política de tipos de interés negativos del BCE que ha impedido a los fondos de pensiones generar los recursos necesarios para mantener la cuantía de las prestaciones.

Los sindicatos ya han realizado protestas y huelgas por el recorte de las pensiones. Y han amenazado con más acciones si el gobierno no interviene.

El próximo jueves está prevista la celebración de un debate sobre este asunto en el parlamento holandés.

Es importante estudiar la solución que propone el ministro holandés de empleo y asuntos sociales y la respuesta del resto de los grupos parlamentarios.

Los Países Bajos tienen uno de los sistemas de jubilación más generosos de Europa,muy parecido al del Reino Unido. Consta de una pensión estatal básica y de las prestaciones de planes de pensiones administrados por el empleador, que en conjunto pagan a los trabajadores cuando se jubilan alrededor del 80% de su salario promedio.

Los Países Bajos son una de las naciones más ricas de la Unión Europea, y  si su sistema de pensiones no es capaz de mantener el actual nivel de las pensiones, es lógico pensar que este problema también afectará al resto de los países de la Unión.

El problema del sistema de pensiones holandés constituye un claro aviso de lo que puede estar por venir al resto de los países de la Unión. Y especialmente a los jubilados españoles.

Los QE´s y la política monetaria del BCE, de Draghi, hace más ricos a los inversores en bolsa, pero unos tipos de interés negativos van a provocar un recorte de las pensiones.

Se pueden imaginar lo que sucederá con las pensiones holanddesas durante la próxima recesión de la Eurozona, cuando el BCE se vea obligado a reducir aún más los tipos de interés negativos en el proceso, amenazando aún con más recortes de pensiones.

Desde que el FED comenzó con el QE4, el S&P 500 no ha parado de subir.

 

Gráfico diario del S&P 500 Contado

 

El dinero creado por el FED debería impulsar la actividad económica, pero lo que realmente están consiguiendo es impulsar las bolsas al alza.

A pesar de que no haya noticias claras sobre el progreso de las conversaciones entre EEUU y China no han disuadido a los inversores de realizar nuevas compras.

Incluso, ni siquiera los pésimos resultados de Home Depot o Kohl's han descarrilado la tendencia alcista de corto plazo del S&P 500.  

El sentimiento alcista de los inversores es el mayor factor de riesgo a corto plazo en bolsa, tal y como hemos dicho en comentarios anteriores.  La última encuesta mensual de BofA-Merrill Lynch  reflejó que el efectivo disponible por los fondos de inversión ha caído al nivel más bajo de los últimos seis años.

Ahora bien, la pregunta es sencilla: ¿cuándo podría producirse esa brusca corrección a la baja en las bolsas estadounidenses?

Evidentemente no lo sabemos, pero resulta muy probable que se produzca en este mes.

Nos vamos a fijar en la recta directriz alcista del S&P 500. En la actualidad pasa por la zona de los 3.100, que es además un soporte gráfico.

Mientras el S&P 500 se mantenga por encima de ese nivel, mantendremos una predisposición alcista. Incluso, a pesar del elevado nivel de complacencia existente entre los inversores y los gestores de fondos estadounidenses.

El DAX Xetra experimentó en la sesión del martes un escape al alza ante la fuerte inyección de liquidez realizada por el banco central de China, pero finalmente resultó un escape falso al alza. Durante la primera parte del día superó la resistencia de la zona 13.300, pero a continuación se giró a la baja y volvió a la zona de fluctuación.

Ese movimiento aumenta el riesgo de que perfore el 13.130 y se encamine hacia la siguiente zona de soporte situada en torno a 12.975.

En el IBEX 35 se produjo un movimiento similar: apertura al alza, superación del 9.300 y cierre por debajo de ese nivel.  Nos vamos a fijar en el soporte de la zona 9.200, su perforación abriría el camino hacia el 9.000.