Las declaraciones de los participantes de mercado son catastróficas y el sentimiento bajista se ha disparado hasta niveles extremos incluso en algunos países donde el mercado no ha sufrido casi castigo como en EEUU (ver “Pesimismo extremo, ¿rebote asegurado?”). El posicionamiento bajista en contra del euro alcanza niveles record (ver “Especulación máxima contra el euro”) a medida que