Se sabía que si llegaba la decepción motivada por las palabras de Mario Draghi, esta iba a ser tremenda y así ha sido. En idéntica sintonía las principales plazas europeas se dedicaron en la sesión de ayer a dibujar velas, más bien a la baja, al compás de las palabras del presidente del BCE.

IBEX 35 DRAGHI


Ayer la reacción del Ibex 35 fue ‘la excepción que confirmó la regla’ dado que tan sólo en un 15% de las ocasiones este 2014 la bolsa española ha caído el día de la reunión mensual del Banco Central Europeo. Ayer el desplome del Ibex fue del 2,35%. Pero, ¿qué fue lo que desató las ventas, las compras para dar lugar nuevamente a las caídas?

- La falta de concreción y el no anuncio de un programa de compra de deuda pública. Mario Draghi emplazó a una próxima reunión en 2015 la aprobación de un QE, aunque, según sus palabras, no se trata de un objetivo por lo que no tiene necesariamente que llevarse a cabo. “Los elementos clave de este programa son el ritmo, el tamaño y los activos” a los que iría dirigido, comentó Draghi, pero esto se sabrá en un futuro. ¿Qué alegó? Que aún queda mucho por hacer vía programa de ABS y covered bonds y, además, no se conoce el resultado de la segunda subasta TLTRO que se celebrará el próximo 11 de diciembre.

- De repente, salió a la palestra la palabra ‘unanimidad’ del Consejo del BCE. Resulta, según el presidente, que no será necesaria en caso de querer sacar adelante un QE a la europea, será necesaria simplemente una mayoría consensuada de sus miembros. ¿Cuál es el significado de esto? Que los alemanes no son necesarios. Se puede adoptar una decisión, aún a pesar de que ellos se muestren contrarios. En ese momento, las ventas se contuvieron y las bolsas redujeron significativamente sus pérdidas.

- Y, sin embargo, ante la insistencia de los periodistas que se encontraban ayer en Fráncfort, Mario Draghi volvió a repetir el esquema ya empleado en las últimas reuniones con especial énfasis: “no tolerarán ninguna desviación prolongada en el tiempo del mandato” que tiene asignado, esto es, controlar la inflación alrededor del 2%. Todo lo demás, daba la sensación, no importa...

- Pero lo que realmente supuso un punto de inflexión fue el paso a un lado que dio Draghi respecto a las dos grandes economías desarrolladas. En su opinión, los momentos en los que Estados Unidos y Japón –además de UK- aprobaron sendos programas de compras de activos no pueden asemejarse a la Unión Europea. ¿Por qué? Fundamentalmente, además de por otros motivos, porque ellos están comprando su propia deuda y no una generalidad de bonos que son los que conforman la UME. ¿Llegará realmente un QE en Europa o es más el enésimo cuento de Navidad de Mario Draghi? 

 
El ‘terremoto Draghi’
¿Y si ya no fueran suficiente sólo las palabras? El forward guidance, que tan buenos frutos le ha reportado, podría estar demasiado gastado ya. Los mercados han comenzado a exigir hechos, no palabras, y el resultado en las bolsas han sido las ventas generalizadas que en nuestro país han venido a afectar, sobre todo, a la banca y a las constructoras.

DRAGHI RALLY


Si nos ajustamos al ‘sell in may and go away…, la teoría dice que hay que comprar en noviembre para vender en plena primavera. ¿Qué ha pasado entonces?

Ibex 35. Desde el 1 de noviembre, momento en el que teóricamente arranca el rally que llega hasta Navidad, el selectivo español acumulaba unas ganancias del 11,43% con lo que consiguió borrar el mal sabor de boca tanto del verano como de la corrección del mes de octubre.

Sin embargo, tras la sesión de este jueves, su avance se limita al 7%.

Dax 30 y Cac 40. El impacto de las palabras del BCE fue considerablemente menor, de hecho, el impacto ha sido más importante en la periferia que, por otro lado, también fue la gran beneficiada en su momento. En el caso del selectivo alemán, este ha retrocedido un punto porcentual dejando el rally en el 6,5% (su balance anual es del 4,8%); mientras que la Bolsa de París reduce sus compras al 3.1%, frente al 4,7% con el que contaba el 3 de diciembre. En el año acumula una subida del 6,6%.

 
¿Y qué hay de la banca? La española lo ha sufrido bien. BBVA, Banco Popular y Bankia han borrado de un plumazo el color verde de su balance anual en bolsa. Adiós a las ganancias que, aunque escasan, firmaron el banco de referencia de los curas españoles y la entidad nacionalizada antes del discurso del BCE.

Obviamente sobre la cotización de Bankia pesó mucho el informe publicado por el Banco de España en el que se reconocía que sus números no correspondían a la realidad, ni los datos ofrecidos por Rodrigo Rato, que se intuía, ni tampoco los de su actual presidente, José Ignacio Goirigolzarri.

BBVA es la peor entidad del año con unas pérdidas del 6,10% al cierre de este jueves.

De entre las grandes, el Banco Santander y Caixabank borraron de un plumazo un 3% de sus ganancias y quedan a día de hoy con un rally desde el 1 de noviembre del 2,6% y el 5,6%.

En la misma línea de caída se sitúan dos medianas como son Bankinter, que se anota a posteriori ganancias superiores al 10%, mientras que el Banco Sabadell suma un 2,4% y hasta un 21,5% en el año.