Las Vegas. 27 de agosto. La estrella de boxeo, Floyd Mayweather, protagoniza una instantánea curiosa. Se le ve gritando, rabioso. Enfrente tiene a un señor de avanzada edad, que está siendo sujetado por varias personas ante lo que parece una situación acalorada entre ambos. Ese hombre es
Warren Buffett.

El Oráculo de Omaha fue partícipe de una de las bromas más destacadas de los últimos días en territorio americano. La instantánea del enfrenamiento dialéctico entre sendos rostros conocidos dio la vuelta al mundo y generó expectación, hasta que se certificó que, como era obvio, se trataba de un momento jocoso retratado con una guasa desmedida.

La razón era muy simple. El multimillonario estadounidense se encontraba en la capital del estado de Nevada en el preludio de su 84º cumpleaños. Fue entonces cuando decidió visitar al famoso boxeador en un gimnasio en el que se entrena habitualmente y, con una mente lúcida y semblante sarcástico, tomó la decisión de tomarle el pelo al mundo.

No hay quien le pare. Es una muestra de que el inversor más famoso de Estados Unidos y del resto del planeta se encuentra en estado de gracia. Son muchos años generando montantes insultantes de millones de dólares a través de su holding, Berkshire Hathaway. Largo tiempo sentándose en el trono de las finanzas.

Sin embargo, durante los últimos tiempos ha nacido una nueva inquietud que ha merodeado por los corros de opinión de los mercados. Y es que Buffett no ha hilado tan fino puesto que de los últimos cinco años, solamente en una ocasión ha logrado batir al S&P 500, índice de referencia en Wall Street.

Concretizando, en 2009 estuvo por debajo un 6,7%, en 2010 se quedó a un 2,1%, en 2011 lo batió con una ganancia superior del 2,5%, en 2012 tampoco pudo con el y se situó por debajo un 1,6%, mientras que el pasado ejercicio, con el gran rally que tuvimos entre manos, se quedó a un 14,2%.

Últimos años de inversión de Warren Buffett


Por supuesto, esto no indica que hayan generado pérdidas sus estrategias de inversión, ni mucho menos. Únicamente que la fórmula que en los 80 y los 90 le hacía sobresalir por encima del selectivo bursátil más importante del parqué neoyorkino, puesto que lo superaba una y otra vez casi sin interrupciones, ya no le ha funciona de la misma manera, tomando como referencia este último lustro.

Este ejemplo se hace más patente si nos fijamos en la evolución de su cartera desde principios de año. Hasta 8 son las compañías que, por el momento, le producen pérdidas a la empresa que dirige el natural de Omaha. De entre ellas: Coca-Cola, American Express, Bank of America, Wal-Mart, Procter&Gamble, o General Motors. Esta última, con creces.

Asimismo, mientras el S&P 500 ha mostrado ganancias de más de un 9%, Buffett apenas supera el 2% de beneficio. Por tanto, de terminar así el ejercicio, el veterano inversor se volvería a quedar otro año más por debajo de los niveles que marca con su marcha rauda y veloz del índice más importante de Wall Street.

Todo está por ver. A Warren Buffett ya nadie le va a quitar el éxito a nivel de finanzas y tampoco nadie le va a dar lecciones en ese terreno. Simplemente su lucidez en los mercados no ha estado acorde con lo que había demostrado previamente. No siempre se está en la cima pero, aún con todo, su compañía sigue batiendo previsiones trimestre a trimestre. Además el mercado quiere, y mucho, a este tiburón financiero. Que cumpla muchos más…