De nuevo la política ha vuelto a intervenir en la evolución de la bolsa en Estados Unidos. Las complicaciones que se está encontrando el gobierno de Donald Trump para poder reemplazar la ley sanitaria conocida como Obamacare ha elevado las preocupaciones más allá  y ahora muchos inversores se plantean si los problemas llegarán también a la posible reforma fiscal.  

 
Por el momento, los expertos ven cada vez menos probable que el esperado recorte de impuestos se produzca –tal y como quería el gobierno- antes del parón de agosto.  Por otro lado, el gobierno tampoco ha concretado mucho más sobre su proyecto para seguir adelante con la desregulación del sistema financiero y la reforma de la llamada Ley Dodd-Frank.

Evolución sectorial

 
Todo esta indefinición ha provocado que los inversores teman cada vez más la llegada de una corrección que pudiera llevarse parte de lo acumulado durante las elecciones. Esta posibilidad, de hecho, comienza a pesar sobre algunos sectores como el bancario, que llevan meses desafiando las leyes de la gravedad.
 
Independientemente de que se desregularice el sector, la industria financiera está en su mejor momento desde hace años. Una vez superada la crisis han logrado reforzar sus ratios de capital desde niveles del 5% al 10-11% actual. Por otro lado, la normalización monetaria de la FED ha provocado que los inversores comiencen a percibir una mejora en sus niveles de rentabilidad.

Casi nueve años después de la crisis financiera el sector parece estar poniendo los pies en el suelo. Sin embargo en los últimos meses ha corrido tanto, que ha sido el que más ha caído cuando han comenzado las dudas.  Desde la elección hasta máximos, los bancos había subido más de un 30% en bolsa en Wall Street, tal y como puede observarse en el siguiente gráfico que ha preparado Bloomberg.

Bancos desde Trump

 
En lo que va de mes, los datos de Facset muestran que la industria se ha dejado más de un 4%. Esto ha reducido sus ganancias en lo que va de año, con lo que ya solo acumulan subidas de poco más de un 1%, lo que implica que se ha convertido en el tercer peor sector desde enero en Wall Street.

Bancos

 
El banco que peor lo hace desde el 1 de enero es Morgan Stanley, que se deja más de un 8% desde que comenzó el mes. Eso sí, hay que tener en cuenta que en doce meses es el segundo mejor de los grandes bancos en bolsa, con alzas de más de un 64% en este tiempo.

Bancos un año

 
De hecho, no hay ni una sola de las grandes entidades que estén en positivo en marzo. La que menos se deja es JP Morgan Chase, que cede alrededor de un 4%. Por cierto, sube más de un 40% en los doce últimos meses.
 
Pero, ¿cuáles son las entidades que tienen un mejor aspecto en estos momentos? De las grandes, todas tienen una recomendación media de sobreponderar, salvo State Street y Wells Fargo, a las que las que el consenso les otorga una recomendación de neutral.
 
Si nos fijamos en el potencial, Morgan Stanley sería la que tendría más recorrido, de más de un 12%, según el consenso que prepara Facset. Detrás se encontrarían Citigroup y State Street, que podría subir más de un 11%, tal y como se puede ver en la siguiente tabla.

Potencial

 
Por otro lado, hay cuatro entidades que han recibido una puntuación de 10  por los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión: Goldman Sachs, Bank of America, JP Morgan y Morgan Stanley. Esto implica que todas ellas están en fase alcista y sin ningún aspecto negativo.
 
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