El Ibex 35 abre la semana con un rebote discreto que le vuelve a colocar, eso sí, por encima de los 7.800 puntos que se le escaparon por la mínima el viernes. En el punto de mira está el país vecino, luego que el el Tribunal Constitucional de Portugal haya declarado ilegales los recortes en las pagas extra a funcionarios y pensionistas y el nuevo impuesto sobre el seguro de salud y desempleo, lo que deja al Gobierno sin unas medidas de ahorro que equivalían a más de mil millones de euros. El Ejecutivo luso no ha tenido más remedio que dar mandato a los ministerios de que reduzcan al máximo su gasto. A pesar de esta incertidumbre, la prima de riesgo española cede a 345 puntos básicos.

Con este telón de fondo, observamos en cabeza del Ibex 35 a Acciona, que se dispara un 2,21%, después de poner en venta el 30% de su filial energética por 1.000 millones; seguida de Grifols, que avanza un 2%.

En el lado contrario, sólo dos valores se tiñen de rojo: Indra (0,34%) y BME (0,05%).

A destacar del 1,77% que experimenta IAG, en un movimiento de rebote que hace ojos ciegos al rechazo del Sepla al acuerdo del ERE de Iberia. Técnicamente, Luis Lorenzo, analista de Dif Broker, indica que “si el Ibex 35 visita los 7.500 puntos, IAG podría ver los 2,45-2,50 euros, que es por donde pasa la directriz principal que trae desde septiembre. Tomaríamos una posición arriesgada en 2.70 y, más segura, en niveles de 2,45-2,40 euros”.

En el grupo de los blue chips, Telefónica sube un 0,19%, Repsol un 1%, Iberdrola un 0,67%, Inditex un 0,89%, Santander un 1,27% y BBVA un 1,17%.

En el Mercado Continuo…
La Seda de Barcelona
se dispara un 9,73% ante cambios en la conformación de su accionariado, seguida de Deoleo, que sube un 5,88%.

Los valores más penalizados del mercado español son Sniace (5,48%) y Bodegas Riojanas (5,08%).