Estamos asistiendo al cambio desde una era en la que el dinero ha sido extremadamente barato hacia otra en la cual el precio del dinero está empezando a subir, no va a ser un proceso rápido, pero si constante y que va a tardar en completarse de dos a tres años. Europa y Japón mantendrán los tipos bajos por más tiempo, pero el resto del mundo se unirá a los Estados Unidos. Y como primera consecuencia de la subida del precio del dinero, veremos como la inflación también aumenta, además de un aumento en los niveles de ahorro. Esta subida de tipos va a suponer un costosísimo incremento a la hora de pagar los intereses de la deuda generada por los ingentes déficits presupuestarios, que han sido asumibles con tipos bajos, pero que se van a disparar a medida que los tipos vuelva a la normalidad, porque no nos equivoquemos, la situación de tipos cero ha sido una situación especial que ha durado una década.

El último punto que se menciona es que se puede esperar una guerra comercial entre los Estados Unidos y Europa, generada por la acelerada subida del USD frente al Euro, el razonamiento es claro: ¿Por qué voy a tener mi dinero a tipo cero si en USD me pueden estar dando un 4%? Y esto (un Euro débil) lo que va a generar es básicamente es que el superávit de la balanza comercial entre Europa y Estados Unidos, no sólo siga, sino que se incremente de tal manera que desde los Estados Unidos tomen medidas para contrarrestar su creciente déficit comercial.

Y mientras leía el artículo, he repasado el gráfico del EURUSD (Semanal) y confirma el viaje a la debilidad del Euro, después de haber estado moviéndose lateralmente desde marzo de 2015, es decir desde hace dos años, entre los 1.14500 y los 1.04500, son la resistencia y el soporte respectivos que deberá superar en un sentido u otro para marcar dirección. La tendencia principal sigue siendo bajista técnicamente, y los fundamentales parecen corroborar la tendencia, así que el Euro va a por la paridad y previsiblemente más allá.
 
Exito,

Miguel Cedillo