A pesar del elevado descuento con el que se hace la ampliación de capital y las posibles pérdidas contables en 2016 si finalmente se materializan las incertidumbres regulatorias, consideramos que es positiva la estrategia del Grupo haciendo "borrón y cuenta nueva" para preparar el balance y los niveles de solvencia de cara a 2018 atendiendo a un entorno de tipos bajos que continuará previsiblemente durante 2017.

Teniendo en cuenta el punto de partida y la cancelación del dividendo, los objetivos para 2018 parecen ambiciosos pero no imposibles si valoramos la fortaleza del banco en el negocio de los segmentos de Pymes y autónomos, la recuperación económica en España y del sector inmobiliario, posibles operaciones corporativas, unos niveles altos de eficiencia y los efectos positivos que se derivan del cumplimiento de reducción de los activos no rentables con un consumo alto de capital.

El principal riesgo para el banco está en la resolución del Tribunal Europeo sobre la retroactividad de las cláusulas suelo. En caso de verse obligados a devolver el dinero desde el momento de la constitución de las hipotecas, el banco tiene dotado para este motivo 350 millones de euros (en 4T15), por lo que las necesidades de nuevas provisiones estarían acotadas. 

Aunque las perspectivas para el sector no son halagüeñas en el entorno actual y sigue existiendo presión regulatoria, creemos que la mejora de las coberturas de los activos problemáticos no rentables y una reducción de los mismos a ritmos superiores a los vistos en los últimos trimestres aportan visibilidad para poder alcanzar un balance más equilibrado y reducir las dudas del mercado derivadas de su exposición al sector inmobiliario. Y todo ello, a pesar de tener por delante un 2016 negativo por el lado de resultados y de transición en 2017, donde deberíamos ver los primeros efectos de la estrategia del banco.

Aun considerando que estamos hablando de un sector muy presionado en el corto plazo (tipos en mínimos, requerimientos regulatorios...), consideramos que los niveles a los que cotiza Popular (P/VC 0,4x) justifican una recomendación de acudir a la ampliación de capital en una empresa que reforzará de forma significativa su balance y rentabilidad.

Detalles de la operación:
Importe de la ampliación: 2.505 mln de euros (48% de su capitalización bursátil pre anuncio).

Nº de acciones nuevas a emitir: 2.004,4 mln de acciones (91% de las actualmente en circulación).

Precio de la ampliación: 1,25 euros/acción, lo que supone un descuento del -47% sobre el precio de cierre del 25 de mayo y del -31,6% sobre el precio ajustado por el VTD (TERP).

Serán necesarios 14 derechos para suscribir 13 acciones nuevas, con un periodo de suscripción preferente que irá del 28 de mayo al 11 de junio, una vez publicado anuncio del aumento de capital en el BORME el día 27 de mayo. 

Objetivo de la ampliación: fortalecer el balance del banco, mejorar sus índices de rentabilidad así como sus niveles de solvencia y de calidad de activos. Tras el aumento de capital, Popular dispondrá de un mejor margen de maniobra frente a requerimientos regulatorios futuros y frente a la posibilidad de que se materialicen determinadas incertidumbres que puedan afectar de forma significativa a sus estimaciones contables. 

Para el caso de que se materializasen parcial o totalmente estas incertidumbres, se estima que la necesidad de reforzamiento de los niveles de coberturas de los activos no rentables durante el ejercicio 2016 podría ascender hasta un importe aproximado de 4.700 millones de euros (vs 1.000 millones de euros en 2015 de dotación a provisiones), y supondría un aumento de 12 pp en el nivel de cobertura hasta un 50%, en línea con el promedio del sector. 

De producirse esta situación, ocasionaría previsiblemente pérdidas contables en el ejercicio (vs beneficio neto consenso 2016e 362 mln de euros) que quedarían íntegramente cubiertas, a efectos de solvencia, por el aumento del capital, así como una suspensión temporal del reparto del dividendo, de cara a afrontar dicho entorno de incertidumbre con la mayor solidez posible.

Preparando el camino para alcanzar Objetivos 2018
El incremento de las coberturas de los activos no rentables (NPA), que en 1T16 ascendían a 33.600 mln de euros, debería traducirse en una mayor venta de inmuebles y mejora de la morosidad apoyando el objetivo de reducir en 15.000 mln de euros el saldo de NPA para 2018e. 

Una aceleración de la venta de activos que vemos factible en un entorno de recuperación del mercado inmobiliario, donde ya se ven incrementos de los precios de la vivienda en todas las regiones y del número de viviendas vendidas. 

Ratios de capital: en 2016 la entidad estima que finalizará el año con un CET 1 "fully loaded" del 10,8%, recogiendo el efecto negativo de la dotación a provisiones en el beneficio, la ampliación de capital, la reducción de los APR, el efecto de la compra de Barclaycard y el impacto negativo en capital por la generación de nuevos activos fiscales del orden de 800 mln de euros. Un ratio CET 1 "fully loaded" que en 2018 esperan situar por encima del 12% apoyado por una reducción estimada de APR de 9.500 mln de euros vs 2015.

Mejora de la rentabilidad: objetivo RoTE superior al 9% en 2018e. Esperan una mejora de la rentabilidad hasta mínimo el 9% en 3 años (vs 3% en 2016) basado en el modelo de negocio y la caída del coste de riesgo por desinversión de activos no productivos y la mejora de las coberturas, y que incluye el impacto del pago de los cupones de las emisiones de AT1.

Política de dividendos: cancelan el dividendo con cargo a 2016, y reanudarán los pagos de dividendos (tanto en efectivo como en especie) tan pronto como el Grupo informe de resultados consolidados trimestrales positivos en 2017, sujeto a autorizaciones administrativas, habiendo determinado como objetivo una ratio de pago de dividendo en efectivo de al menos 40% para 2018.